"... apasionados de la palabra, de los sentimientos... De todo aquello que hace que la vida sea mejor. Con gusto mediador"
Hola:
Somos Sebastián García y Carmen Sánchez, y en esta segunda etapa de nuestras vidas surge la idea de crear "Con Actitud y Media". Psicólogo y abogada que tienen como nexo en común la pasión por la mediación, la ilusión de hacer que la vida sea mejor con la palabra y la cultura del acuerdo.
Este es nuestro momento de "desaprender para aprender", como tantas veces nos ha dicho nuestro querido Javier Alés Sioli, y nos encantaría compartirlo con todos vosotros, con toda la ilusión del mundo. Intentaremos desde una frase diaria, comentar, contar... reflexionar en definitiva para hacer que "cada día cuente". Contaros también nuestros logros y nuestros avatares. Os esperamos.

lunes, 26 de septiembre de 2016

26 de septiembre de 2016
Que me lo quiten todo......menos la memoria por favor.

Si me preguntaran cúal de los cinco serntidos que tenemos, vista, olfato, tacto, gusto y oído  me importaría menos perder, no se cúal de ellos diría. Pienso que la vista es fundamental, el no poder ver cuando te levantas el sol, o la lluvia, o no poder verte reflejada en el espejo, o no poder ver a la gente querida, o simplemente no valerte por ti misma, no poder salir sola, leer un libro, escoger el color que te gusta, o ver las flores o un amanecer.....tiene que ser algo muy doloroso.
Si nos quedamos sin oído, qué solos nos sentiríamos. Un silencio constante, el no poder relacionarnos con los demás, el no poder escuchar el sonido del mar, de los pájaros, la radio o tu canción preferida. También nos resultaría frustrante.
¿Y si nos quedáramos sin tacto? ¿Y si fuera sin gusto o por el contrario, sin olfato?
Todos los sentidos son primordiales, nos falta uno y nuestro mundo cambia por completo.

Ahora, la pregunta sería, ¿y si nos quedáramos sin memoria?
Perder toda una vida, no poder recordar lo que fuiste, lo que hiciste, a las personas queridas. Tener tu mente vacía de recuerdos vividos. Para mí el mejor regalo, como se suele decir, es el recuerdo. Son esas vivencias, el sentirte orgulloso por lo logrado a lo largo de la vida. Los momentos felices por los que pasas, las personas que están  y las que no están, la sabiduría, lo aprendido, lo deseado, lo conseguido......
Una vida vacía de contenido, como si te volcaran y te sacaran todo lo que has ido guardando  con tanto esfuerzo.
Ha sido "el día mundial del Alzheimer", o como le llaman, "la epidemia del siglo XXI". La mejor forma de prevenirlo es darlo a conocer.
Que injusto que mientras unos intentan olvidar, otros luchan por recordar.
Vaya este artículo por todos ellos y también por los que los rodean, el alzheimer golpea el cerebro del enfermo y el corazón de los familiares.
Aunque ellos olviden no los olvidemos nosotros, y ante todo la esperanza de encontrar alguna solución. Estoy segura de ello.
Buena semana, ¡la última del mes de septiembre!

lunes, 12 de septiembre de 2016

12 de septiembre de 2016
Easy going persons.



Empiezo la semana con un hambreeeee, pero un hambre de .......inglés. No os podéis hacer una idea de la falta que me hace ponerme las pilas, ya en serio. Siempre he dicho que lo que más envidio de esta generación es la facilidad para aprender idiomas y para poder después salir a otros países. A mi que me encanta viajar daría algo por manejarme con total fluidez al menos en inglés, que con él se va a cualquier lado, y no haciéndolo como un indio y ayudada en ocasiones por los gestos, las manos....
Así titulo hoy mi artículo, en inglés, para empezar desde ya, lo prometido es deuda.
¿Que qué son los "Easy going persons"?, son personas flexibles, de trato fácil con las que puedes relacionarte cómodamente. Personas que solemos buscar y ansiamos encontrar, aún cuando a lo mejor nosotros no lo seamos.
He estado unos días en Londres acompañando a una de mis hijas que se queda allí para estudiar y trabajar. ¡Me encanta Londres!, o como le he estado repitiendo durante estos días a mi hija, "I love it". El trato con el nativo de allí, el londinense, eso ya es otro cantar. Menos mal que la mayoría es gente de otras nacionalidades y con ello de un trato más fácil.
Ahora, si hay algo complicado en esta ciudad es encontrar una vivienda para compartir, como diríamos aquí, "buena, bonita y barata". ¡Carísimo!

¿Por qué los caseros se piensa que por ser joven, estudiante.....ya puedes vivir en cualquier parte y de cualquier forma? En fin....
 Si buscar piso es complicado, el hacerlo y compartirlo con otros, ya sea que estén ya viviendo en esa vivienda y tengan una habitación para alquilar, o bien que encuentres un piso y tengas también que buscar a otros que la compartan contigo, es doblemente difícil.
Ahora las redes sociales facilitan mucho las cosas. Ponen su perfil e intentan compaginarse con perfiles similares. Jóvenes de distinta nacionalidad, distintas costumbres, distintos sexos, y gustos dispares, compartiendo casa, gastos, horarios....y manteniendo una relación estable y duradera (al menos hasta que se cumpla el contrato de alquiler).
Atractivo para los jóvenes y pienso que también beneficioso. Hoy en día las parejas se soportan cada vez menos tiempo, no saben compartir, aguantar o no han sabido escoger bien. 
De esta forma, chicos que no se conocen están en contacto unos con otros teniendo que imponer unas normas de convivencia y cumplirlas para que haya una armonía. De ahí la importancia de tener alrededor a gente de trato fácil y poder entrenarse para ser uno de ellos.

Si lo que perseguimos en la vida es sentirnos orgullosos y felices, esto sería muy complicado si las relaciones sociales son estresantes, ya que la vida estaría llena de tensiones.
Ante esto, lo mejor es ser flexible que mejora la comunicación y facilita el entendimiento.
En esta tesitura hemos dejado a mi hija en la amada Londres, y desde aquí le doy un consejo con palabras de Goethe: "La forma en que ves a la gente es la forma en la que la tratas, y la forma en la que la tratas es en lo que se convierte".
Como te he dicho esta mañana "tell me about it later", luego me cuentas.
We wish you god speed in every thing you are trying to do, ¡y ya te veo corrigiéndome!


lunes, 5 de septiembre de 2016

5 de septiembre de 2016
Una primera cita......


Tengo que confesar algo y lo voy a hacer sin tapujos, aunque esto me cueste que una de mis hijas me diga todo lo que yo le he dicho durante mucho tiempo por hacer lo mismo.
Tengo que confesar.... que este verano me he enganchado a un programa de Cuatro que se llama "First dates". Si, un reality show, yo, la que siempre ha criticado este tipo de programas, si, lo confieso.
Lo primero que me atrajo de él fue su presentador, Carlos Sobera, ¡que me encanta!

Empecé a verlo por él, y después tengo que reconocer que me enganchó del todo.
En parte por mi ramalazo "mediador", en parte por rememorar esa primera cita que todos hemos tenido y que nunca se olvida.
Para los que nunca lo hayáis visto os diré que consiste en emparejar personas que previamente han escrito al programa en busca de un amor. Gente de distintas edades y condición, tanto heterosexuales como homosexuales, solter@s, separad@s.....
Con un vídeo casero se presentan y una vez que se definen como son, describen como les gustaría que fuera la persona con la que van a tener esa primera cita. Después el programa hará un trabajo psicológico bastante considerable de forma que una encaje con la otra.
Al principio las parejas que venían eran personas separadas o solteras, pero de una media de 30 años. Personas que por circunstancias familiares o de trabajo no tienen posibilidades de encontrar pareja o al menos de conocer gente interesante para mantener una relación.
Ya en los últimos programas, mi asombro, por no decir mi desconcierto, fue ver chic@s de 18, 19 y 20 años solicitando encontrar un amor, alguien que comparta su vida y sus aficiones.
Iba a decir ¡no me lo puedo creer!, pero sinceramente y siendo consciente de lo que nos rodea, ¡si me lo puedo creer!

En fin, me gusta ver como se desenvuelven y qué es lo que les interesa saber en esa primera cita de la otra persona. También me llama la atención la desenvoltura que tienen ante las cámaras y la facilidad con la que cuentan cosas tan íntimas.
El programa dura lo que dura una cena, y una vez intercambian impresiones y en alguna ocasión, "alguna que otra cosa más", deciden si quieren tener una segunda.
Cuando pienso en mi primera cita, ya hace muuuucho tiempo, recuerdo nervios, miradas, risas......y sobre todo mucha ilusión. El arte de conquistar no se debería de perder nunca, su intimidad, su complicidad, el desconocimiento, el desconcierto, y ese cosquilleo en el estómago que, si la persona que te cortejaba te gustaba, no dejabas de reirte por cualquier tontería. ¡Algo fantástico!
Tengo que decir que también tuve una cita a ciegas, yo no lo conocía y él a mi si. Fue en la facultad, una situación un poco extraña, ya que yo ya tenía novio, y hasta llegar a este punto pasé un buen mal trago. Quienes si se lo pasaron de lo grande fueron esas "queridas" amigas que estaban vigilando para ver lo que sucedía. ¡Eran otros tiempos!
Ya de vuelta, con las pilas cargadas, comenzando nueva etapa y con ganas de muchas cosas. Esta seguirá siendo nuestra cita, y si para algunos es la primera, al menos que no sea la última.